Estucado rojo
Lo confieso, señor agente, yo maté a Marta Arias. En mi defensa debo decir que no era una persona que hiciera bien a la sociedad, aunque quizás solo merecía un tiempo en la cárcel y el castigo de la muerte...
Lo confieso, señor agente, yo maté a Marta Arias. En mi defensa debo decir que no era una persona que hiciera bien a la sociedad, aunque quizás solo merecía un tiempo en la cárcel y el castigo de la muerte...