El diálogo muestra a los personajes (psicología, ideología, propósitos, entre otros), aporta dinamismo y credibilidad a la trama (no lo dice el autor sino los personajes). La idea aquí será, además, usarlo como un instrumento de giro.
Se dice que los años bisiestos son especiales. Y al menos porque el 29 de febrero aparece en el calendario cada cuatro años, hay que darle la razón a la creencia. ¿O será porque ese día suceden cosas inusitadas, por lo buenas… o por lo malas.
Alejandro Jodorowsky sostiene que la imaginación se sustenta en cuatro pilares fundamentales que equivalen a las cuatro operaciones matemáticas básicas: ampliación o suma, disminución resta, multiplicación y división. Veamos.
En todo cuento el protagonista, o personaje principal tiene un antagonista, su opuesto. La interacción entre ellos es la que da vida a la historia, enciende su motor.
Continuando con nuestro viaje de la realidad a la ficción, vamos a comenzar con una de las formas narrativas que más usamos cotidianamente: la anécdota.
Si bien no hay una fórmula para construir finales, es bueno tener en cuenta que un buen desenlace debe reunir algunas condiciones para que el lector sienta que «colorín colorado, este cuento ha terminado».
A la hora de narrar, debemos escoger desde dónde y desde quién hacerlo. ¿La acción va a estar lejos o cerca de donde está el narrador? ¿Será observador o parte de la misma?